El novecentismo puede considerarse como un movimiento inaugural del siglo XX. A caballo entre el 98 y el 27, el movimiento sentó las bases de lo que constituye la época contemporánea española. Una generación muy influenciada por las nuevas corrientes literarias que se desarrollaban por toda Europa. Las obras de los autores de la generación del 14 estaban dirigidas a grupos cultos, pero influyeron en todas las capas sociales. Centrados en Europa, dejan de ver a España como el centro del mundo, atienden a lo universal y se niegan a encerrarse en lo nacional. Si bien el problema español sigue vigente, este se analiza de una forma más rigurosa y no tan sentimental. Resisten el pesimismo y buscan soluciones a los problemas imperantes en España, a diferencia de la corriente literaria precedente. Rompen con algunas de las normas establecidas por las generaciones previas y crean un estilo muy innovador, más acorde con la modernidad del siglo XX.