En Mi Vida y Nada Más, DCB rememora el pasado reciente cohesionándolo con el presente candente, enfrentando así, en el decisivo combate, a sus endémicos ángeles salvadores contra sus concurridos demonios de la extinción. Extrayendo, igualmente, de lo muerto y de lo vivo, un conciso mapa más clarificado, hacia el sendero de la esperanza y la casi imposible felicidad. Este libro nos muestra la plenitud de una mente inquieta, e inquietante en ocasiones, capítulo a capítulo, conocimiento a conocimiento, persona conocida a persona desconocida, alcanzado finalmente su cúspide en un viaje añorado por muchos años, que conducirá al autor a cierto tipo de mística que añoraba desde niño, y que definitivamente, tan sólo logró alcanzar en su más puro estado de despersonalización y desesperación en la edad moderna y la rutina diaria.