La exclusiva agencia europea Brio, cuyas actividades de inteligencia y experimentación son indisociables, ha detectado una brecha en su delegación española. Brio España ha actualizado y dado un impulso definitivo a un antiguo producto en desuso, el Barle, que se aplica en modo loción facial y duplica el rendimiento físico y mental. La intrusión rusa en la red de Brio para usurpar el «dosier Barle», merced a información filtrada desde el seno de la agencia española, dará lugar a la intervención del agente especial Daniel Ros y de su colega francesa Aurélie Blois para desactivar la confabulación, primero desde los despachos en París y posteriormente sobre el terreno en San Petersburgo, donde se encuentran los instigadores de la trama. Daniel y Aurélie, además de trazar un preciso plan, deberán recabar adeptos para su causa, tanto a través de las conexiones de Brio en la ciudad de los zares como dentro del círculo de los confabuladores, en un intento de desactivar la conspiración urdida contra Brio.