El leccionario del año litúrgico, que tiene como centro la persona de Jesucristo, quedó estructurado después del Concilio Vaticano II en tres ciclos (A, B y C) con tres lecturas para cada domingo. Un tesoro escondido contiene una reflexión y estudio, en clave de lectio divina, del evangelio del ciclo A. Con esta iniciativa, pretendemos que los acontecimientos de la vida de Cristo marquen el ritmo y ofrezcan profundidad y sabor a nuestra vida cotidiana.Esta publicación quiere ser el acompañante cercano y accesible que se hace presente para ofrecer rayos de luz en el camino. Lo decisivo es que la Palabra hecha carne, el tesoro por excelencia, vuelva a encarnarse en nuestra sociedad, en nuestro mundo. 4