Él se marchó. Ella seguía en el mismo lugar, rodeada por su recuerdo. Un amor inocente les marcó la infancia y la distancia los separó para siempre, o tal vez no. Adam regresa al lugar que un día fue su casa para intentar darle un rumbo a su vida. Él y su madre han dejado todo atrás buscando este nuevo comienzo, aun sabiendo lo que va a encontrarse allí. Nicole todavía es perseguida por la imagen de ese chico que le robó su primer beso. Han pasado casi cinco años; pero ella aún sueña con encontrar entre la multitud sus ojos verdes que la observaban como si fuese la única cosa de valor en el mundo. Para él lo era. El destino les dará una última oportunidad, un último verano; pero no un último adiós. ¿Será suficiente?