Este libro constituye un trabajo en conjunto de dos académicos chilenos destinado a resaltar la importancia de mantener una buena calidad de la enseñanza y el aprendizaje, y así mejorar los estándares y el control de los procesos educativos. Esto se argumenta como un elemento central cuando se está ingresando en la sociedad digital, la cual requiere el manejo de nuevos conceptos y nuevas competencias a ser desarrolladas con metodologías innovadoras. Parte importante del contenido de este libro es el desarrollo de los procesos y las prácticas didácticas más eficaces para la enseñanza y aprendizaje, investigación y trabajo con otros. El libro desarrolla una variedad de ideas que se centran en las metodologías destinadas a mejorar la calidad y diseño de los contenidos curriculares y de los procesos de autoevaluación y retroalimentación. Particular énfasis se otorga a la enseñanza online, como un mecanismo activo que ya se ha instalado en la práctica educativa. El libro formula una invitación a discutir las maneras en que el profesor puede mejorar permanentemente su práctica docente a través de la autoevaluación. El libro sugiere una serie de herramientas para apoyar las prácticas de evaluación, autoevaluación y el desarrollo de sistemas tutoriales, todo enmarcado en la idea de lograr mejores estándares educativos. La idea del libro es que el profesor debe siempre emprender una revisión de su trabajo, y así aprender tanto de los estudiantes como de sus colegas en una variedad de maneras.