El trabajador está expuesto a agentes físicos, ergonómicos, químicos, o biológicos, si está en contacto con una vía apropiada de penetración en el organismo. Los agentes mencionados motivan la puesta al día de los agentes físicos y disergonómicos.El autor destaca a la prevención de los riesgos laborales como elemento fundamental para cuidar la salud psicofísica del trabajador, la economía de la empresa, aseguradoras y de la salud pública.Describe y analiza a los agentes físicos con mayor prevalencia, como el ruido, las vibraciones, la iluminación insuficiente, la presión superior e inferior a la atmósfera estándar, el calor, las radiaciones ionizantes y no ionizantes.En igual forma, los agentes disergonómicos: posiciones forzadas e incómodas, lesiones por esfuerzos repetitivos, la sobrecarga del uso de la voz, el aumento de la presión abdominal y la venosa en miembros inferiores.En cada patología que considera incorpora la tabla de incapacidades laborativas.