Walt Disney alguna vez dijo: Si puedes soñarlo, puedes lograrlo. Y es que soñar es una parte esencial de la vida, es lo que mueve en muchos casos nuestro actuar, lo que nos motiva. Aquel ideal de una vida mejor, de otros mundos posibles, de una realidad alejada de nuestro presente. Y aunque no siempre conseguimos lo que soñamos, la sola emoción de anhelar insistentemente algo, fantasear o ilusionarse nos permite conocernos íntimamente a través de miedos y angustias. Nos lleva a descubrir una fase diferente de nuestra personalidad. Además, juega con nuestra persistencia y credibilidad con lograr una meta que nos pone a prueba.Bienvenidos a este maravilloso viaje.