Jack el Destripador... Un nombre de antología que brilla en el panteón negro de los criminales legendarios: probablemente, el asesino anónimo más conocido del planeta. Su fama imperecedera descansa en su bien guardado anonimato. Se ha vertido más tinta sobre él que la que él ha vertido en todos sus asesinatos; millones y millones de palabras que, si las juntáramos, nos llevarían... a ninguna parte. Sí, a ninguna parte, porque, una vez dicho todo, acumuladas y probadas las pistas, contadas y sopesadas las teorías, pasados por el tamiz del análisis los argumentos a favor de tal o cual sospechoso, siempre llegamos al punto exacto del que partimos: la espesa niebla de la incertidumbre.Siempre... hasta ahora.Gran parte de la fascinación por el caso de Jack el Destripador ha residido siempre en su perdurable misterio; ha surgido un juego de rompecabezas de la seductora posibilidad -e imposibilidad- de interminables conjeturas, que prometen horribles quebraderos de cabeza.Tiene usted en sus manos un libro de la máxima importancia, que cualquiera que tenga un ápice de curiosidad por los asesinatos de Jack el Destripador no debería dejar de leer y considerar con atención infatigable.Promete ser una lectura fascinante. Y ésta, de forma alarmante, ofrece una solución final de lo más convincente.