La obra Interpretación económica de la historia permitirá al lector comprender diversos hechos históricos y de actualidad, entre ellos la guerra entre Ucrania y Rusia; el enfrentamiento entre los israelíes, el pueblo palestino e Irán; el cambio abrupto de orientación política en países como Estados Unidos, Colombia, Chile, El Salvador, Argentina y Portugal; las tensiones para ingresar a la OTAN; el descubrimiento de América; el reparto de África, la Ruta de la Seda (One Belt, One Road); el corredor biocéanico en Surámerica; la esclavitud y la carrera espacial, por citar solamente algunos eventos en el devenir de la humanidad, que pueden ser explicados de mejor manera con el enfoque económico porque constituye el factor común que los integra, pues se trata de la obtención de recursos para la propia subsistencia humana, la inversión productiva, acumular riqueza y ostentar poder. Por lo anterior, se asumió la tarea de traducir este libro del profesor Seligman, de la Universidad de Columbia, en NYC, quien encontró que algunos estudiosos como Morgan, Buckle, Engels, Marx, entre otros, habían sentado las bases para formular la teoría de la interpretación económica de la historia a partir de las ideas de un sinnúmero de pensadores, tales como Aristóteles, Hegel y Bodin, quienes desde diferentes disciplinas y en distintas épocas fueron planteando sus tesis, que, por fortuna para los investigadores de la actualidad, fueron decantadas para formular la síntesis que constituye esta importante obra. Conviene precisar, según advierte Seligman, que el aporte de Marx en esta teoría es de naturaleza histórica (lo que ha sucedido), bien distinta de su teoría teleológica sobre el socialismo (lo que podría suceder), anotando que para comienzos del siglo XX ya se presagiaba el carácter útopico de esta última. Son, pues, dos temas bien diferentes y la importancia del trabajo sobre historia no tiene por qué ser opacado por el fracaso de la otra teoría en el campo político. Al concluir su lectura, el analista imparcial tendrá claro que los conceptos y hechos relativos a la familia, el matriarcado, el patriarcado, las herencias, las cruzadas, el comercio, la tributación, el desarrollo del Estado y hasta los actuales avances tecnológicos con la IA (inteligencia artificial) son fenómenos que están conectados por los hilos que tejieron el desarrollo económico y social de la humanidad.