A medida que avanzaba el año 1895, los sueños de Gwen comenzaron a tomar forma. Sabía que su viaje para convertirse en tutora privada sería un paso audaz hacia un mundo incierto, pero estaba decidida a explorar nuevos horizontes y compartir sus conocimientos con los demás. Poco sabía que su camino pronto la llevaría más allá de las costas de Newport, hasta el corazón del Imperio Británico en Bombay, India, donde se embarcaría en una notable aventura de enseñanza.