El fracaso de los militares golpistas de la Tercera División Orgánica, cuya cabecera era la ciudad de Valencia, para subvertir la legalidad republicana es uno de los hechos más notables de la Guerra Civil española en nuestro territorio. En esta división, los encargados de la preparación de la trama golpista eran los miembros de la Unión Militar Española (UME), asociación ilegal de militares reaccionarios que, a pesar de su voluntarismo, no habían trazado un plan eficaz para la toma del mando y la declaración del estado de guerra en todas las provincias bajo su autoridad militar. En esta obra se evidencian los factores que provocaron el fracaso absoluto de la intentona golpista después de varias semanas de incertidumbre: el cambio a última hora del general encargado de la toma de la División, la pasividad y en algunos casos la abierta oposición de los coroneles en jefe de los regimientos, la nula coordinación de la Junta de la UME con los oficiales de la Guardia Civil, así como la declaración de la huelga general y la creación de las diferentes milicias de partidos y sindicatos.