Pese a contar con la estructuración propia de cualquier ensayo de corte academicista, Ekonomía ha sido escrito con la intencionalidad de poner en conocimiento del común de los ciudadanos el esfuerzo analítico de un español de a pie y de discutir con sus iguales si algo tan fundamental como la economía es en verdad un corpus metafísico vedado a casi 8.000 millones de humanos, que sólo contamos como productores necesarios. Consciente de que todo cuanto afecte al sinvivir cotidiano de la humanidad es opinable, sin más restricciones que el respeto a los especialistas en la materia y a la capacidad intelectual de cualquiera que sienta la inquietud de lecturas presuntamente aprovechables, el autor asume el riesgo personal de la puesta en circulación de una obra como esta, verdadera patada al avispero que es la economía occidental de nuestros días.