Beño, en su modestia, jamás imaginó que sus artículos acabarían formando un libro como éste, ya que los consideraba «flor de un día», tan efímeros como la rosa del azafrán, que nace al salir el sol y muere al caer la tarde. Sin embargo, hubiera sido una terrible injusticia dejar que permanecieran en el olvido, ya que conforman una obra de importancia capital, no ya en el bagaje literario de su autor, sino en el ámbito de la literatura periodística de todos los tiempos de este país.En su primera etapa, mientras vivió en La Mancha, Beño nos describe un mundo y unos ambientes humanos un tanto arcaicos y pintorescos que desaparecieron hace tiempo. Sirviéndose de un pequeño pueblo manchego como excusa, realiza un estudio sociológico y psicológico fascinante sobre la vida provinciana española de la segunda mitad del siglo XX. Pero Beño no cae nunca en el mero costumbrismo y consigue despertar el interés intelectual del lector, ya que su punto de vista es universal y pone el foco en aspectos esenciales de la condición humana, transferibles, por tanto, a cualquier época o lugar. Más adelante, cuando se establece en Sevilla, dirige su mirada hacia temas más exóticos de los que no se había atrevido a hablar antes, convirtiendo cada artículo en un pequeño ensayo en el que realiza interesantísimos trabajos de investigación, siendo uno de sus temas más recurrentes la preocupación por el patrimonio artístico y cultural, ya que, como él mismo dijo una vez, «la historia y la tradición son para las naciones como el alma en el cuerpo». A Beño le obsesionaba asimismo entender el sentido de la vida, las circunstancias o razones que inducen a los seres humanos a actuar de un modo o de otro, y analiza a numerosos personajes históricos de todo tipo con gran inteligencia y perspicacia, dedicando también su interés y su curiosidad a los asuntos propios de Andalucía, cuyas costumbres, ritos y modos de vida estudia con rara fascinación.Estamos, pues, ante una obra imprescindible dentro del ámbito de la narrativa periodística española del siglo XX, llevada a cabo por un escritor con grandes recursos, muy creativo y versátil, con una mirada diferente, terriblemente inquieto y vital, capaz de sorprendernos con cada palabra que escribe. Un escritor único, atípico e irrepetible, que merecería un lugar de honor en el canon de la literatura española del siglo XX. 10