Todas las personas que están alrededor de los niños y que interactúan con ellos (padres, tíos, abuelos, primos, amigos de la familia, maestros, etc.) pueden contribuir a que el desarrollo de ese niño sea lo más saludable posible. Esta´ en nuestras manos las de los adultos promover su óptimo desarrollo y favorecer la constitución de un adulto más sano, con más posibilidades de funcionar adecuadamente en sociedad. 10