Graciela Zárate nos regala en A contraluz de embargo un poemario valiente sobre el desahucio vivido en primera persona, la lucha, el abandono de lo material, la necesidad de aferrarse a lo inasible, de renovarse y seguir el camino. Cuando nuestra autora, poeta inédita hasta la publicación de este libro y, sin embargo, reconocida en distintos ámbitos culturales, recibe la carta de embargo decide refugiarse en la poesía, plasmar en el papel sus sentimientos de frustración y de esperanza. Quizás sea cosa del destino que este poemario haya visto la luz justo el día en que Graciela cerraba definitivamente las puertas de su casa. Recogemos las palabras de la poeta Teresa Núñez, fiel reflejo de lo que nos encontramos en este poemario: La vemos venir abrigada en nostalgias y guernicas, que es como abrigarse con todo el dolor del mundo. Se moldea a sí misma con lo que le ha quedado de su anterior existencia. Así surge su poesía primera de la mano del tiempo y de la superación. Nacer de nuevo, buscar la razón de las cosas y dejar atrás el sufrimiento son los puntos donde surge su poesía como un desgarro. 10